003: What I know about Uncertainty
(This blog entry is much better appreciated when listening to this track)
The first thing you need to know about Uncertainty is that she's a bitch. I mean, it's basic good-manners not to go around thrusting unexpected stuff on people. Even if it's good news, like a surprise birthday party. Its unsettling and startling. The second thing you need to know is that' she's also deeply, deeply desireable. You just have to learn how to love her.
Most people, they just hate the bare concept of Uncertainty. Let alone befriending her. Making her an ally (which, honestly, is the only logical thing to do when faced with any force you know you can't win against). No. Most people can't stand having her in their lives. She makes everything so messy. Nothing is reliable anymore, not when she's around. When faced with Uncertainty, we shiver, we fear, we... we reject it. We don't like surprises. Most people will tell you that they are happy with the way everything is. That they are okay. Even if they are miserable.
But when you face Uncertainty from a new perspective, you can begin to see her beauty. You can push yourself past the first layers of surprises and possibility, and you learn to appreciate it's wonderful, clever design. Because see, you gotta hand it to her, it's a pretty clever system. And it's simple: You just never know what's gonna happen. And if you can't fight that, if you can't help things happening, then why resist? Why?
I think it is possible to live your live without it. You can mold your life so accurately to reduce the Uncertainty factor as much as possible. But even then you're not excent. You're still vulnerable. Just like the rest of us. But what kind of life is that? Who'd want to live that way? Safely cradled in Safety's arms. Letting life go by.
It's certainly no walk in the park, welcoming her into your life and greet her as an old friend. But it's the difference between having bad news delivered by a complete stranger and having them delivered by a dear friend. The moment something unfolds and changes the way everything is, forever, irreplaceably, it's always better to have a loved one say it. Or even if it's good news. When something wonderful happens, it's not so cool to have it said by some random stranger, is it?
And you know, yes. Tomorrow the cat may die. Or he will never call you again. Or you'll finally figure your life out in the middle of a completely ordinary day, looking out of the window in the bus. Maybe you'll suddenly find yourself commited to something, or someone. Or perhaps a friend will betray you. Or who knows? You'll finally, finally get what you've been wishing for.
That's the point: Who knows? And if you can learn to appreciate the beauty in that, if you can just wrap your mind around the fact that chance and never-knowing can be tragically beautiful... then you start to understand. Surprises aren't so unsettling and fear seems to retreat.
Uncertainty is gonna manifest itself. We can't stop that. To the afraid and secure type, that will always be a worrysome thing. To the wild and free, that will always be a thrill and a reason to wake up from bed every morning.
I'm just getting to know her. I'm just getting to letting her be and do her thing. I'm just along for the ride. All I can do is wish for her to deliver what will give my heart it's content. And when she doesn't, when she gets moody and gives me a hard time... well, I guess I'll just have to push through it and remember that it isn't easy for her either. But I gotta learn somehow, right? I gotta happen. I gotta be faced with problems and compromises, so I can grow. Just like a severe but extremely loving mother, Uncertainty won't stay still while you do nothing with your life. She'll make you understand. She'll help you grow. Even if it hurts more her than you, she'll do it.
And for that, we should be grateful.
003: Lo que sé sobre la Incertidumbre
(Este posteo se disfruta más escuchando este tema)
Lo primero que necesitás que saber sobre la Incertidumbre es que es una zorra. Quiero decir, es un buen modal básico el no ir por ahí arrojándole cosas inesperadas a la gente. Incluso si son buenas noticias, como una fiesta de cumpleaños sorpresa. Es desconcertante. La segunda cosa que necesitás saber es que también profundamente deseable. Sólo tenes que aprender cómo quererla.
La mayoría de la gente odia el mero concepto de Incertidumbre. Ni hablar de hacer amigos. O hacerla una aliada (lo que, francamente, es lo único lógico que hacer al enfrentarse a una fuerza que sabés que no podes vencer). No. La mayoría de la gente no pueden ni aguantar tenerla en sus vidas. Hace que todo se enriede. No se puede depender en nada nunca más, no cuando ella está cerca. Cuando nos enfrentamos a la Incertidumbre, temblamos, tememos.. la rechazamos. No nos gustan las sorpresas. La mayoría de la gente te dirá que están felices con la forma en la que va todo. Que las cosas están bien. Incluso si son miserables.
Pero cuando enfrentas a la Incertidumbre desde una nueva perspectiva, empezás a ver su belleza. Podés empujar más allá de las primeras capas de sorpresas y posibilidad, y aprendés a apreciar su maravilloso e ingenioso diseño. Porque, ves, hay que admitírselo, es un sistema muy ingenioso. Y es simple: Nunca sabés lo que va a pasar. Y si no podés combatir eso, si no podés evitar que las cosas sucedan, por qué resistirse? Por qué?
Creo que es posible vivir tu vida sin ella. Podés moldear tu vida tan precisamente que reduzcas el factor de Incertidumbre al mínimo. Pero incluso así no estás exento. Seguís siendo vulnerable. Igual que el resto de nosotros. Pero qué clase de vida es esa? Quien querría vivir así? Mecido seguramente en los brazos de la Seguridad. Dejando que la vida pase.
No es que sea un paseo por el parque, bienvenirla en tu vida y saludarla como a una vieja amiga. Pero es la diferencia entre que te diga malas noticias un completo extraño o que te las diga tu mejor amigo. El momento en que algo se desvela y cambia todo, para siempre, irremplazablemente, siempre es mejor que te lo diga alguien a quien querés. O incluso si son buenas noticias. Cuando pasa algo maravilloso, no está tan bueno que te lo diga un extraño cualquiera, no?
Y sabés, sí. Mañana puede morir el gato. O él no te va a llamar nunca más. O tal vez finalmente entendés tu vida en el medio de un día completamente ordinario, mirando por la ventana del colectivo. Tal vez de repente te encontrás comprometido a algo, o alguien. O a lo mejor un amigo te traiciona. O quien sabe? Puede ser que finalmente, finalmente obtengas lo que tanto querías.
Ese es el punto: Quien sabe? Y si podés aprender a apreciar la belleza en eso, si podés envolver tu mente alrededor del hecho de que las chances y el no saber pueden ser trágicamente hermosos... entonces empezás a entender. Las sorpresas no son tan desconcertantes, y el miedo parece retraerse.
La Incertidumbre va a manifestarse. No podemos detenerlo. Para los asegurados y asustados, eso siempre va a ser una cosa preocupante. Para los libres y salvajes, siempre va a ser una emoción y la razón para levantarse de la cama en las mañanas.
Yo recién estoy empezando a conocerla. Estoy empezando a dejarla ser y hacer lo suyo. Yo simplemente soy parte del viaje. Todo lo que puedo hacer es desear que le entregue contento a mi corazón. Y cuando no lo haga, cuando se ponga de mal humor y me la haga pasar mal... bueno, supongo que tendré que aguantar y recordar que tampoco es fácil para ella. Pero tengo que aprender de alguna forma, verdad? Tengo que ocurrir. Tengo que ser enfrentado con problemas y compromisos, para poder crecer. Igual que una severa pero amorosa madre, la Incertidumbre no va a quedarse quieta mientras vos no hacés nada on tu vida. Va a hacerte entender. Va a ayudarte a crecer. Incluso si le duele más a ella que a vos, lo va a hacer.
Y por eso, deberíamos estar agradecidos.
(Este posteo se disfruta más escuchando este tema)
Lo primero que necesitás que saber sobre la Incertidumbre es que es una zorra. Quiero decir, es un buen modal básico el no ir por ahí arrojándole cosas inesperadas a la gente. Incluso si son buenas noticias, como una fiesta de cumpleaños sorpresa. Es desconcertante. La segunda cosa que necesitás saber es que también profundamente deseable. Sólo tenes que aprender cómo quererla.
La mayoría de la gente odia el mero concepto de Incertidumbre. Ni hablar de hacer amigos. O hacerla una aliada (lo que, francamente, es lo único lógico que hacer al enfrentarse a una fuerza que sabés que no podes vencer). No. La mayoría de la gente no pueden ni aguantar tenerla en sus vidas. Hace que todo se enriede. No se puede depender en nada nunca más, no cuando ella está cerca. Cuando nos enfrentamos a la Incertidumbre, temblamos, tememos.. la rechazamos. No nos gustan las sorpresas. La mayoría de la gente te dirá que están felices con la forma en la que va todo. Que las cosas están bien. Incluso si son miserables.
Pero cuando enfrentas a la Incertidumbre desde una nueva perspectiva, empezás a ver su belleza. Podés empujar más allá de las primeras capas de sorpresas y posibilidad, y aprendés a apreciar su maravilloso e ingenioso diseño. Porque, ves, hay que admitírselo, es un sistema muy ingenioso. Y es simple: Nunca sabés lo que va a pasar. Y si no podés combatir eso, si no podés evitar que las cosas sucedan, por qué resistirse? Por qué?
Creo que es posible vivir tu vida sin ella. Podés moldear tu vida tan precisamente que reduzcas el factor de Incertidumbre al mínimo. Pero incluso así no estás exento. Seguís siendo vulnerable. Igual que el resto de nosotros. Pero qué clase de vida es esa? Quien querría vivir así? Mecido seguramente en los brazos de la Seguridad. Dejando que la vida pase.
No es que sea un paseo por el parque, bienvenirla en tu vida y saludarla como a una vieja amiga. Pero es la diferencia entre que te diga malas noticias un completo extraño o que te las diga tu mejor amigo. El momento en que algo se desvela y cambia todo, para siempre, irremplazablemente, siempre es mejor que te lo diga alguien a quien querés. O incluso si son buenas noticias. Cuando pasa algo maravilloso, no está tan bueno que te lo diga un extraño cualquiera, no?
Y sabés, sí. Mañana puede morir el gato. O él no te va a llamar nunca más. O tal vez finalmente entendés tu vida en el medio de un día completamente ordinario, mirando por la ventana del colectivo. Tal vez de repente te encontrás comprometido a algo, o alguien. O a lo mejor un amigo te traiciona. O quien sabe? Puede ser que finalmente, finalmente obtengas lo que tanto querías.
Ese es el punto: Quien sabe? Y si podés aprender a apreciar la belleza en eso, si podés envolver tu mente alrededor del hecho de que las chances y el no saber pueden ser trágicamente hermosos... entonces empezás a entender. Las sorpresas no son tan desconcertantes, y el miedo parece retraerse.
La Incertidumbre va a manifestarse. No podemos detenerlo. Para los asegurados y asustados, eso siempre va a ser una cosa preocupante. Para los libres y salvajes, siempre va a ser una emoción y la razón para levantarse de la cama en las mañanas.
Yo recién estoy empezando a conocerla. Estoy empezando a dejarla ser y hacer lo suyo. Yo simplemente soy parte del viaje. Todo lo que puedo hacer es desear que le entregue contento a mi corazón. Y cuando no lo haga, cuando se ponga de mal humor y me la haga pasar mal... bueno, supongo que tendré que aguantar y recordar que tampoco es fácil para ella. Pero tengo que aprender de alguna forma, verdad? Tengo que ocurrir. Tengo que ser enfrentado con problemas y compromisos, para poder crecer. Igual que una severa pero amorosa madre, la Incertidumbre no va a quedarse quieta mientras vos no hacés nada on tu vida. Va a hacerte entender. Va a ayudarte a crecer. Incluso si le duele más a ella que a vos, lo va a hacer.
Y por eso, deberíamos estar agradecidos.